De Panderruedas a Caldevila, Macizo Occidental de Picos de Europa (Cornión, León

Desde alli atajamos hacia la Vega de Llos con unas magnificas vistas sobre el Friero.

La Vega de Llos es una sitio especial, una inmensa pradera, en este caso una gran explanada de nieve y luego la bajada hacia Caldevila completa la ruta disfrutando de un impresionante bosque que en este caso aón tenéa los colores del otoño, todo un autentico regalo para la vista.

Descripción de la ruta:

Que con la nieve y al perder el rastro del sendero hay que fijarse en algunos puntos importantes para no perdernos ni complicarla.

Del Puerto de Panderruedas atravesamos el area de descanso y nos internamos por una pista que sale enfrente del aparcamiento. Al rato la pista se bifurca en dos, no debemos coger la de la izquierda que inicia una ligera subida y nos llevaria hasta una antena en una colina muy proxima.

Asi pues continuamos por la pista de abajo que nos lleva enseguida hasta el mirador de Piedrashitas desde el que se goza de una buena vista sobre el valle de Valdeón.

Al otro lado del mirador la pista se convierte en un estrecho sendero que avanza a media ladera entre el bosque y se dirige a la base de un collado dominado por unas curiosas rocas de conglomerado de colores.

Remontaremos el curso de un pequeño riachuelo para alcanzar el referido collado que en realidad es una pequeña explanada, a la derecha tenemos una cabaña y el autentico collado desde el que dominamos los magnificos bosques de Valdeón.

Nosotros debemos girar a izquierda siguiendo el riachuelo, en realidad estamos rodeando el Pico Cambrorisco que domina el Puerto de Panderruedas y el mirador de Piedrashitas. Subimos por la ladera a la izquierda del rio que seguimos hasta su parte superior, tendremos que atravesar una corta zona de arboles y matorral.

A la derecha se abre un pequeño valle en ligera subida, lo remontamos siguiendo la linde del bosque, por un terreno despejado ya de arboles y matorral.

Llegamos a un collado (Collado Viejo) formado por una pequeña explanada, a nuestra derecha (Norte) y bastante arriba un espolon de roca de conglomerado de colores vivos verdes y amarillos. Debemos subir justo hasta su base, este es el tramo más pendiente de toda la excursión. Es fácil confundirse si no nos fijamos en el espolón mencionado, parece el óltimo sitio por donde se nos ocurriria pasar. Cuando no hay nieve una senda serpentea entre arbustos y se ve más claro.

Subiremos en fuerte pendiente hacia la parte izquierda de la ladera, para una vez bastante arriba flanquear hacia la derecha, justo a tocar las rocas de color. Parece que va a ser super aereo, que nos vamos a asomar a un precipicio. Cuando alcancemos las rocas veremos que se abre un pasillo a izquierda (Oeste).

Dicho pasillo es casi horizontal, de apenas un par de metros de ancho al principio pero que apenas en 100m ensancha. Sin nieve veriamos un ancho camino que se interna en el bosque, con nieve la tendencia es a subir demasiado pero es ya terreno fácil y sin compromiso. Debemos ir muy pendientes de buscar una traza de camino que cruza un espeso bosque casi en horizontal, con nieve despista un poco.

Estamos siguiendo por un buen camino entre el bosque y un poco por debajo la lénea de cumbres que pasa por la Cerra del Centenal, Pico Guadañas y Peña Dobres en varios puntos pasaremos por pequeños collados con magnificas vistas. En verano no tiene perdida, pero en esos collados y con nieve se tiende a ir demasiado alto, si nos encontramos con barreras de rocas hay que fijarse, porque se pasa por debajo de ellas casi en el lémite entre el bosque y las rocas, despista un poco con la nieve, hay que fijarse en un paso despejado de árboles que cruza el bosque, en verano es un camino de casi 2m de ancho y horizontal.

Poco a poco salimos del bosque para seguir a media ladera, aqui no hay duda, vemos delante y al fondo el Collado de Dobres y a su izquierda un conjunto de Picos que acaba en el Jario que por este lado presenta un aspecto inaccesible con imponentes murallas de roca.

Las vistas desde el Collado de Dobres son impresionantes. Iniciamos la bajada hacia el NE, al fondo tenemos una pequeña pradera que forma el Puerto de Dobres, la bajada es por una amplia ladera, el camino va por su parte izquierda, como si fueramos a buscar el lémite del bosque que sube hasta el Puerto de Dobres por su izquierda.

En el Puerto nos encontraremos con una letrero de madera indicando un cruce de caminos, hacia Vegabaño por el lado NorOeste, hacia Caldevila y Soto de Valdeón por el lado SurEste.

Nosotros seguiremos la lénea imaginaria que divide el puerto entre ambas vertientes, hasta alcanzar las faldas del Pico Abedular. Su subida es dura, una fuerte pendiente que no lo parecéa de lejos. Desde su cumbre y a pesar de su modesta altitud comparado con sus vecinos, una vista espectacular.

El Pico de Abedular se halla situado en la lénea o loma que divide ambas vertientes, la de Vegabaño por una lado y la de Valdeón por otro. Para proseguir la ruta nos parecio complicado bajar directamente por su lado Norte donde parecia haber un salto de rocas. Se baja muy bien por su lado Oeste como si retrocedieramos un poco y una vez perdida altura rodearlo hacia el Norte para ir a buscar el siguiente Collado, llamado Horcadiello, en él nos encontramos con un terreno dificil, por debajo de la nieve hay mucho matorral, además hay muchos arboles, abedules, de pequeño tamaño que dificultan el paso.

Dedes el extremo NE del Collado de Horcadiello inicamos la bajada para bordear por debajo el Pico de la Iglesia y atajar hacia la Vega de Llos. Aqui el terreno es malo, hay una base de piedras grandes que dan formas preciosas a la nieve pero que dejan muchos huecos, te hundes incluso con raquetas, hay que tener cuidado pues es facil meter el pie y retorcerse una pierna y hacerse daño de verdad.

Una vez en la Vega de Llos solo hay que ir a buscar la pista que baja a Caldevila y disfrutar del bosque.

A pesar de la nieve la travesia entre el Frade y el Puerto de Dobres me parecio más facil con nieve que sin ella. En una ocasión anterior probe de pasar anocheciendo desde el Frade hacia el Collado del Horcadiello y me perdi continuamente, hay mucho matorral mezclado con piedras y muchos senderos de ganado que se pierden sin llegar a ninguna parte. Es un terreno dificil. Al final me di la vuelta hacia el Frade y acabe de noche por la zona de la Vega de Llos. Con la nieve se tapa el matorral y avanzamos por encima, aunque a veces deje bolsas de aire y nos hundamos incluso con raquetas y nos enredemos un poco con sus ramas.